¿Porque no tienes tiempo de trabajar la comunicación y tu empresa no tiene departamento de marketing?
¿Porque tu competencia aparece en los primeros resultados de búsqueda en Google y tú no lo consigues?
¿Porque no sabes qué decir en tu página web, ni redes sociales, ni cuándo, ni cómo?
En el trabajo, como en la vida, considero que hay que cuidar lo que se hace. Por eso, con los años y tras pisar varias agencias, entendí que ese no era mi camino, porque no soy partidaria de prisas, sino más bien de mimo y cuidado.
Conocer al cliente, su marca, objetivos y sueños considero que es importante a la hora de transmitir qué hace su empresa.
En mi vida personal y profesional todo han sido cambios hasta que encontré mi sitio con mi propia empresa.
Siempre me han atraído la comunicación y la publicidad.
Son ya casi dos décadas las que llevo en el mundo de la publicidad y el marketing, y cerca de 10 en la comunicación digital.
Y si algo me ha costado realmente, ha sido que mis padres y demás familiares entiendan a qué me dedico; porque era decir “digital” y ya me piden que les arregle el ordenador.
En 2015 comencé mi andadura como autónomo sin muchas esperanzas, pero sabiendo lo que quería. Por aquel entonces trabajaba por cuenta ajena en una empresa como directora de marketing, pero sentía que no era mi sitio.
Había creado un negocio y estaba haciendo trabajillos a conocidos aquí y allá así que decidí dejar la empresa en la que trabajaba para centrarme en mi negocio. Pero el síndrome del impostor y la falta de recursos me hacían volver una y otra vez a la «estabilidad» de un trabajo por cuenta ajena.
Y así, llegó la pandemia.
En aquel momento llevaba años viviendo en Canarias. Era feliz en lo personal, tenía buenos clientes estables y, además, un trabajo decente en una empresa. Y todo se fue al traste.
A finales de 2020 volvía a Bilbao con una mano delante y otra detrás. Pero esta vez, me había cansado, decidí ir a por todas y me puse manos a la obra con mi empresa. Y aquí estoy, viviendo los mejores años de mi vida trabajando en lo que me gusta y ayudando a marcas como la tuya a crecer.
Ante un problema, actúo. Pero antes he aprendido a pensar, aunque sea rápido.
No soy amiga de los “sí porque sí” ni de los “no porque no”.
Creo firmemente que si no lo intentas no lo consigues. Por eso hice mío el lema: es mejor arrepentirse de lo que haces, que arrepentirte de no haberlo intentado.
No me gustan los anglicismos, (pero a veces los uso).
Me siento tremendamente orgullosa de mi familia.
Estoy enamorada de una isla y sus gentes (los que me conocen dicen que soy cansina con el tema).
Considero que tener mi propia empresa es lo mejor que me ha pasado en mi andadura profesional.
Gracias por dedicar parte de tu tiempo a saber quién soy y de dónde vengo.
¿Me dejas conocerte a ti?
